La grúa ha robado mi coche

Hola, le llamo de Madrid Movilidad. Mire, es que su coche molesta para una mudanza. ¿Podría acercarse en menos de media hora y retirar su coche?

Si no es posible, tendremos que retirarlo, con todo el cariño del mundo, y llevarlo al depósito de la grúa municipal que está en la calle blablabla. Puede pasar a retirarlo cuando pueda, pero no tenga prisa, porque como su coche estaba perfectamente aparcado no tiene que pagar ningún coste por retirar su vehículo.

Eso es lo que me gustaría que hubiera ocurrido. Sin embargo, la realidad ha sido otra.

Domingo por la mañana, cargados con cosas que llevar a casa de mis padres, buscamos el coche. No está donde lo había dejado aparcado. En su lugar hay otro coche.

Por si acaso sufría de enajenación mental, antes de sufrir el mal trago de denunciar un robo y encontrar el coche en otra calle, nos dividimos y peinamos las calles del barrio que sean susceptibles de haber dejado el coche en ellas. No hay suerte.

Regresamos a casa con un disgustazo encima. Sin entender cómo puede haber gente que se dedique a fastidiar así la vida a los demás. Porque nuestro coche es viejo y tiene gotelé; nadie daría un duro por él. Sin embargo, a nosotros nos hace el apaño. Y sobre todo ahora que tenemos que organizar unas cosillas en nuestros respectivos hogares paternos. Perder el coche trastocaba todos nuestros planes de los próximos meses, entre otras cosas, porque no tenemos tiempo de buscar un coche nuevo.

Con el disgusto, llamo a mis padres para decirles que no podremos llegar a tiempo para la comida familiar (mi madre había hecho bizcocho para celebrar un cumpleaños). A continuación íbamos a buscar cómo denunciar el robo de un coche. Pero antes, sin tener la más mínima esperanza, puesto que habíamos dejado el coche aparcado correctamente en su plaza de residente, llamamos a un número de la grúa municipal que encontramos en Internet. Tras hablar con una máquina y meter unos números, nos confirman que nuestro coche está en el depósito. No podemos saber el motivo por el cual está ahí, porque en ningún momento te dejan hablar con una persona.

Mientras nos dirigimos al depósito a por el coche (en metro, of course), varias ideas rondan nuestra mente: Si el coche estaba bien aparcado, no hay motivo para retirarlo. Por tanto, alguien ha podido robar nuestro coche, reventarlo y dejarlo tirado por cualquier lado. A lo mejor ha aparecido el coche, pero está destrozado y no se puede usar. A lo mejor alguien le dio un golpe al coche… Y más ideas, la que más me irritaba era la de que se hubieran llevado el coche porque sí, por ejemplo, porque molestara en una mudanza y encima nos hicieran pagar para sacar el coche.

No hemos tenido que pagar nada. Pero hubiera pagado de antemano si hubiera podido evitar que me amargaran el domingo.

Para poder aparcar en una plaza de residente tuve que empadronarme y dar mis datos. ¿No podrían haberlos usado para al menos ahorrarme el mal trago de creer que me había quedado sin coche?